Estimad@s compañer@s
Tod@s sabemos, o se supone que deberíamos saber, que la Sanidad Pública no es una empresa que tenga que dar beneficios; para eso se destina una parte de nuestros impuestos y para eso tod@s l@s trabajador@s, por cuenta ajena y autónom@s, asi como empresas y desemplead@s, pagamos todos los meses un concepto conocido como “Retribución a Seguridad Social”.
Por ello, nos parece un tanto ingenuo escuchar frases como que la sanidad da pérdidas. Resulta inconcebible oir eso una y otra vez; por ello, si se investiga un poco, podemos encontrarnos sorpresas como las siguientes (y todo esto es público):
Nuestros actuales dirigentes (Gobierno central y autonómico del PP proyectan privatizar la SANIDAD PÚBLICA para… ENRIQUECERSE… ¡ENRIQUECERSE A LO BESTIA!.
Más claro agua…
LA TÁCTICA ES DEMOSTRAR QUE LO PÚBLICO NO FUNCIONA Y ASÍ PONER EN MANOS DEL SECTOR PRIVADO LOS HOSPITALES, LOS MEDIOS TERAPÉUTICOS Y TODO EL SISTEMA ACTUAL PARA ROBARNOS.
A fecha de hoy -por poner un ejemplo- los recortes han supuesto que, en el hospital de Guadalajara, una resonancia magnética haya pasado de una LISTA DE ESPERA DE 18 DÍAS, a 250 DÍAS, y si quieres hacerte la resonancia TIENES QUE IR A UNA CLÍNICA PRIVADA. ¿Quién está detrás de este filón? …entre otras, la empresa “CAPIO SANIDAD”
En la Comunidad de Castilla-La Mancha están al borde de la privatización 4 hospitales públicos , con la excusa de que no son rentables (¡¿…?!).
¿DESDE CUÁNDO LA ATENCIÓN DE LA SALUD SE MIDE POR CRITERIOS ECONOMICISTAS?.
Se podrán aplicar medidas de contención del gasto, de calidad del servicio, pero nunca se podrá decir que un hospital es igual que una fábrica de lavadoras.
Parece ser que “CAPIO SANIDAD” va a ser la empresa privada de gestión sanitaria a la que se van a regalar los cuatro hospitales públicos.
RODRIGO RATO (recientemente despedido como presidente de BANKIA y anterior vicepresidente segundo del gobierno de AZNAR), a través de BANKIA también tiene intereses y acciones en Capio , lo cual no es ilegal, pero… ¡qué casualidad, ¿no?!
¿Sabéis quién es IGNACIO LÓPEZ DEL HIERRO?
Es el marido de MARIA DOLORES DE COSPEDAL (Presidenta de Castilla-La Mancha y Secretaria General del PP), dedicado a muchas actividades… empresariales (ya sabéis), pero, oh!… sorpresa!… también gestiona hospitales .
¿Sabías que el Consejero de Sanidad y Asuntos Sociales de la Junta de Comunidad de Castilla-La Mancha JOSÉ IGNACIO ECHÁNIZ es hermano de Teresa Echániz Salgado, subdirectora de investigación de Capio Sanidad? ¡Qué casualidad! .
Los accionistas de Ribera Salud (Bankia y CAM) se encuentran en proceso de negociación con la multinacional sanitaria Capio para venderle la propiedad .
El proceso se encuentra en fase de negociación del precio definitivo de la operación y la fórmula de financiación.
Capio tiene los ojos puestos en estos concursos, pero también en otros que puedan surgir en la Comunitat Valenciana.
Pero la multinacional no es la única interesada en profundizar en el negocio de la gestión de la sanidad pública.
ATITLÁN , el fondo de inversión que dirige Roberto Centeno (yerno del presidente de Mercadona Juan Roig), no ha renunciado a entrar en un mercado que le permitiría diversificar su actividad.
¡¿…Cómo es posible que algo que no es “rentable” se lo estén disputando?!
¿Qué hay detrás de todo?
Parece claro que el objetivo es cargarse el sistema universal, público y gratuito que tenemos.
Luego están las fórmulas de financiación público-privada y las concesiones de Obra Pública, es decir, la financiación, gestión (y en algunos casos la prestación de servicios) corre a cargo de consorcios integrados de empresas constructoras (levantan los edificios), entidades bancarias (adelantan el dinero) y aseguradoras (gestionan los servicios) ; una vez entregado el centro, la administración (o sea, todos) paga un canon anual por 20-30 años como si fuera un contrato de servicios, que se paga a cargo del gasto corriente del presupuestos (no al capítulo de inversiones), por lo que no computa como deuda pública a pesar de que el coste de los centros (endeudamiento real) se multiplica sobre el coste real de los mismos como se ha comprobado donde se ha implantado este sistema.